jueves, 29 de enero de 2009

Regedit, ese gran desconocido

Hoy hemos pasado un buen rato configurando un ordenador para que no se puedan hacer según que cosas. Para ello, hemos usado el registro de Windows. Desde el registro se puede hacer prácticamente todo. Lanzar aplicaciones al entrar en el PC, inhabilitar opciones, restringir otras, etc...

El problema de tocar el registro, es que tienes que saber lo que estás haciendo, de otro modo puedes alterar alguna clave que haga que tu ordenador, no arranque, se reinicie infinitamente, no permita iniciar sesión, en fin, muchas desgracias, que pueden llegar, incluso, a obligarte a reinstalarlo.

Por lo tanto, si queréis personalizar un ordenador, desde el registro lo podréis hacer, pero con mucha precaución.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta lo que quieras, pero no lo uses para hacerte publicidad, o el comentario será eliminado.