Buscar a quien culpar en lugar de la solución

Esto es lo que ocurre, hoy en día, en muchas empresas. En lugar de arrimar el hombro y ver cómo salir de un apuro, casi todos se dedican a buscar a alguien que cargue con la responsabilidad, de manera, que ellos queden limpios.

Hay una frase que dice un compañero nuestro y nos encanta: somos humanos, alguna vez tendremos que equivocarnos. Y es cierto, gracias a que somos humanos, pensamos, buscamos soluciones y las aplicamos. Unas veces sale bien y otras mal, pero hay que aceptarlo como venga y en caso de fallar, buscar otra solución.

Sin embargo, por desgracia, esta no es la forma de pensar de la mayoría, lo que hace que cuando se cometa un fallo, se busque desesperadamente un culpable, que haga de cabeza de turco. Identificar a alguien, que no suele solucionar nada, es muy sencillo. Lo verás, permanentemente, hablando por el móvil o con cualquiera, a voz en grito, que se entere todo el mundo, que todo funciona gracias a él. Obviamente, es tan torpe, que las cosas que habla muchas veces son soberanas tonterías, por lo cual, casi todos los que lo escuchan se dan cuenta de su inutilidad. Pero claro, a él sólo le importan los que pueden ascenderle que, también por norma general, suelen tener menos idea y piensan que todo lo soluciona él.

¿Qué se consigue con esto? Pues que en cualquier momento, tienes un directivo voceras, que en lugar de ayudarte, te presiona, dejándote con el culo al aire más de una vez y no solucionado problemas. Lamentablemente, hemos vuelto a llegar a la conclusión de siempre, la dirección en este país es lamentable, por eso no nos extraña la cantidad de gente buena, que sale del país para ser reconocida fuera, una pena.

Si por casualidad, lees esto y te ves reflejado, reflexiona, quizás estés muy cerca de ser un lamentable directivo, ganarás más dinero, pero probablemente tu conciencia, no te dejará en paz. Aunque quizá, perder la conciencia, es algo que llega con el puesto.