Vuelta a la rutina

Por muy pocos días de vacaciones que tengas, si consigues desconectar del trabajo, la vuelta es algo bastante duro. Pero mucho más duro es, cuando además el ambiente que te espera no es de tu agrado.

Últimamente hemos insistido mucho en el ambiente de trabajo, pero es verdad que una ambiente en el que se colabora, la gente intenta ayudar, ves que las cosas salen adelante, es mucho más sencillo trabajar, que uno en que todo son trabas, burocracia y las cosas se eternizan.

Uno de los síntomas que puedes tener, que además te aseguran que estás en un ambiente de trabajo, digamos no muy bueno, es cuando normalmente en vacaciones mirabas el correo del trabajo o llevabas el móvil encendido y ahora no lo haces. Tienes tantas ganas de olvidarte de la empresa, que no te implicas en absoluto. Lo que vuelve a demostrar que un buen ambiente hace que la gente, aún estando de vacaciones, rinde mucho más.

Esperamos que este blog, alguna vez, sea leído por algún directivo, de los que denominamos malos, para que piensen si eso sucede en su empresa y lo intenten cambiar. Para nosotros sería un logro, pero nos extraña un montón que eso suceda.