Cuando se quiere complicar...

...la cosas se complican. En la sociedad en la que vivimos, ya hemos dicho alguna vez, que cuanto más conectados estamos, más desconectados estamos. Esta frase, que parece una contradicción, no lo es. Tenemos posibilidad de hablar con las personas, por teléfono, por Internet, por vídeo conferencia, por messenger, ... Pues bien, aún así, hablar con el que tienes al lado, en el puesto de trabajo contiguo, tu compañero de piso, tu pareja, parece que se complica en extremo. Pero no es de esto, de lo que queremos hablar, ya que lo tocamos hace un tiempo y no es cuestión de repetir. Esta vez de lo que queremos hablar es de lo difícil que es la comunicación entre departamentos.

Muchas empresas, tienen deslocalizadas a las personas, en distintos edificios, incluso repartidas en ciudades o países. Pues bien, en lugar de intentar comunicarnos, con lo que la tecnología nos ofrece, lo que hacemos es convocar cientos de reuniones, lo que hace que, la mayor parte de las veces, las decisiones, se dilaten mucho en el tiempo, lo que lleva asociado, alargar los proyectos más de la cuenta.

A nosotros nos toca, más de una vez y de dos, suplicar, por correo electrónico, que alguien nos llame, que no siga cruzando correos y es que, por muy bien que escribas las cosas, como unas palabras no hay nada, por lo que si quieres zanjar algo, háblalo, es lo mejor.

Por lo tanto, si estás en una situación de estas y tienes poder para hacerlo, fomenta la comunicación interdepartamental. Puede que aumente tu consumo telefónico, aunque si usas voz ip, no debería ocurrir, pero seguro que disminuye todo lo demás, las prisas, las ansiedades, ... Probarlo, merece la pena.