Arranca el nuevo curso

Y no escolar precisamente.

La semana pasada, última de Agosto, ya empezaron a llegar los jefes a sus puestos de trabajo, pero esa llegada, era tímida, repasaban las cosas que quedaron pendientes en Julio, etc...

Como todos los años, la primera semana de Septiembre, suele ser la de las prisas, ya ha aterrizado todo el mundo en su puesto y todos quieren, que lo que estaba pendiente, esté acabado a la voz de ¡ya!

Es cierto que todos los años hablamos en estas fechas de esto, pero además este año, creemos que puede ser todavía más duro, ya que estamos en un período de crisis (que dura bastante), lo que hace que todos se pongan nerviosos, cuando empiezan a verse los números de año.

Así que ahora pretenden que todo, lo que durante el año no ha salido, salga, de manera que esos número, nada favorables, se suavicen para salvar su puesto.

Nosotros, pensamos que no es la manera, ya que estresas al personal y al final, los números que salgan, saldrán, lo estreses o no. Con la diferencia que el trabajo se haga a gusto y bien, o a disgusto y mal.

Las crisis, además de traer, menos beneficios o pérdidas, suelen traer, malos ambientes de trabajo, que sólo hacen que se trabaje peor, incluso, en muchos casos, que pierdas personas clave en tu empresa, porque los achuchaste demasiado.

Mucho ojo con estas cosas y, por el bien de la compañía, intentar que no sucedan.