Los horarios

Hablábamos el otro día de las horas que nos obligan a hacer en las empresas, en el caso de la tecnología, sin compensación en la mayoría de los casos. Pero es muy curioso, como cuando se obliga a hacer esas horas, los empleados somos muy reacios a hacerlas, sin embargo, cuando das la posibilidad de salir a tu hora, o incluso antes, también somos reacios a hacerlo.

Y es que, desde recién nacido, el ser humano es totalmente contrario a las órdenes, prefiere ser cada uno el que tome su propia decisión, en base al trabajo que tenga, las ganas, en definitiva, que cuando te imponen algo, por norma general, solemos revelarnos con ello.

Y claro, eso se aplica a todo, si juegas al fútbol por diversión, da igual el tiempo que haga, la hora que sea, si estás lesionado o no, vas. Ahora bien, si es tu profesión, la cosa cambia, a la menor molestia lo dejas, no siempre te viene bien ir a entrenar, etc...

Por eso, en nuestra idea de equipo, siempre está el dar a cada persona del equipo, su cometido y fomentar el "amor propio", por tenerlo bien, de esa manera, será cada persona, la que, en cada momento, decida si tiene que echar horas, o por el contrario, puede salir antes. Con ello se mejora enormemente el rendimiento y con ello, la calidad de lo que se hace.