El refranero es muy sabio y el título de esta entrada es uno de los que más razón tienen. De hecho, en las empresas, se ve muy a menudo. Hay directores, que están como loco recogiendo proyectos, personas, departamentos, y quieren ser responsables y coordinadores de todo y lo que consiguen al final, es no llevar nada bien.
Siempre hemos aconsejado llevar las cosas que podamos, dejando de lado otras, de manera que las cosas que no podamos llevar, no nos quiten un tiempo precioso para el resto. De hecho, cuando las cosas que seamos capaces de manejar, empiecen a funcionar solas, es el momento de añadir nuevas, pero siempre de poco en poco.
Sin embargo, estas personas, que lo que buscan es poder, al final, son expertos en responsabilizar a otros de sus errores, de manera que su mala gestión queda oculta, tras su perfecta capacidad de escurrir el bulto. Por eso, nuestra recomendación, cuando veas a alguien que se dedica a acaparar, que investiguéis su labor y os deis cuenta, que los problema que tiene, que supuestamente, le generan otros, son realmente por su poco capacidad para apretar, en todo lo que abarca.
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