martes, 7 de julio de 2015

Hacerse notar

Una vez más, tenemos que hablar de los directivos y cómo hacen más caso, a los que se hacen notar, que a los que trabajan y son rentables para la compañía. De hecho, nos sorprenden comentarios de gente que se pregunta, ¿cómo es posible que tal departamento unas veces tarde dos horas en hacer tal cosa y otras minutos? La respuesta es sencilla, te están engañando, es algo que se tarda minutos (por eso cuando les aprietas, lo hacen en ese tiempo) y por norma general tardan horas, única y exclusivamente para hacerse notar.

Y claro, cuando alguien se hace notar, lo que consigue es que los malos directivos, se fijen en ellos y les den un valor que no tienen, quitándoselo a otros que tienen mucho mayor valor. Pero las cosas son así y los que trabajan a destajo, sin importarles las medallas o los ascensos, por norma general, se quedarán en eso, en currantes a destajo, que lo único que pueden sacar, llegado el caso, es ganarse la bronca de otro del departamento, que será un listo, alguien que se hace notar, etc...

Esperemos que, poco a poco, esto vaya cambiando y los directivos se vayan rodeando de currantes, que son los que, casi siempre, tienen razones de peso para argumentar sus actos y si se les hace caso, las cosas, suelen funcionar mejor.

lunes, 6 de julio de 2015

El sabelotodo

Siempre se le achaca a los cuñados el ser unos sabelotodos, pero nada más lejos, lo que sí es cierto es que todos conocemos a personas, que lo saben todo. Hables del tema que hables, ellos saben lo que es, y son expertos en el mismo. Eso, obviamente, es imposible y por eso, ese tipo de personas, son bastante insoportables, además de conseguir, el efecto completamente contrario y es que nadie les cree.

Cuando además esa persona, cae en tu equipo de trabajo, estás vendido, porque aunque la mayoría que trata con ellos, los identifica enseguida, en una primera toma de contacto, la sensación que tiene la gente es que él es el que sabe. Por eso, en un proyecto, puede suceder, que le hagan más caso a esa persona que al equipo, por lo que las decisiones que se tomen puede no ser las correctas.

De ahí que si te toca en el equipo alguien así, lo primero que debes hacer es deshacerte de él, pero en caso de no poder hacerlo, intentar por todos los medios, tenerlo tapado para que no tenga oportunidad de hablar más de la cuenta, con personas que pueden tomar decisiones que afecten a la marcha del proyecto.

domingo, 5 de julio de 2015

Sin más refuerzos

Hemos buscado esta semana algún refuerzo adicional, pero no tenemos suficientes fondos, por lo que no hemos podido contratar a nadie. El miércoles tenemos el primer partido de copa y lo jugaremos, como siempre, relajados, sin desgastar al equipo y pensando en la liga, que pretendemos ganar, esperemos, desde el primer partido.

Una temporada más, no será fácil, aunque ganas no nos van a faltar. Lo intentaremos desde el primer partido y echaremos toda la carne en el asador. La afición, aunque ha entendido el descenso, una buena parte ha dejado el equipo, porque pensaba que pudimos hacer más. Esperamos recuperarlos con buen fútbol y regalándoles un ascenso directo, algo que no tuvimos en el anterior ascenso.

Esta última semana antes del arranque liguero, intentaremos conseguir ese refuerzo en defensa que necesitamos, aunque no lo vemos muy factible.

sábado, 4 de julio de 2015

¿Cómo se ve que estás estresado?

Nos hace mucha gracia, cuando en las empresas llega un director y, ante una situación, en la que considera que hay que hacer un sobreesfuerzo, ve a la gente "poco estresada". Nosotros, inmediatamente, nos preguntamos lo que hemos puesto en el título de la entrada.

Y es que, ¿cómo se ve? Tenemos que estar al borde del suicidio, mirando permanente por la ventana, con el ordenador conectado al cerebro,... no lo entendemos. Cuando un equipo se tira 16 días seguidos trabando más de ocho horas diarias, aunque en ese trabajo tenga momentos de distensión, ¿no es suficiente estrés?

Con esto, volvemos a lo que hemos pensado siempre, los malos directores que tenemos, que sólo ven estrés, cuando no paras de llamar por teléfono, escribir correos, en definitiva, abrasar al personal, aunque la efectividad sea nula. Y te das cuenta, que no va a cambiar nunca, porque los que hacen eso, aunque no sean efectivos, serán los que asciendan y exigirán lo mismo.

El cambio cultural en la empresa lo vemos bastante alejado, por lo que la efectividad, seguirá muy lejos de lo que debería ser, y así nos va.

viernes, 3 de julio de 2015

Sancionar o no hacerlo

En las empresas, cuando subcontratas algo, por norma general, tienes cláusulas que permiten sancionar al proveedor en caso de incumplimiento de contrato. Pero claro, cuando vas a sancionar es porque algo no está bien y piensas, ¿merece la pena sancionar?

Pues bien a esta pregunta, en nuestras opinión, hay que valorar muy bien cómo es el contrato, ya que si es de unos meses, pude ocurrir que la sanción, lejos de solucionar el problema, lo agrave, porque la empresa directamente deje de hacer su trabajo y tendrás un problema mayor.

Por eso, en todas las ocasiones, creemos que es muy bueno el diálogo, ya que puedes llegar a acuerdos puntuales, en los que cedas un poco, a cambio de un mejor servicio, para dar el hachazo final, al acabar el contrato, quedándote con la fianza, por ejemplo, pero consigues mantener durante los meses que estén, el proyecto a flote.

Es una pena, pero siempre se aprovechan de esas cosas, tanto el que contrata, como el subcontratado, para intentar aprovecharse del otro, de ahí que no nos dé excesiva lástima ninguno de los dos, ya que el primero, ajusta demasiado el presupuesto y el segundo, intentará ahorrárselo por donde pueda.

Como decimos siempre, si pagas lo que vale, tendrás un buen servicio, si racaneas, el servicio será deficiente.

jueves, 2 de julio de 2015

Lo importante, no es lo que importa

Con el título de la entrada, muchos habréis pensado que nos hemos vuelto locos y no os falta razón, pero es que, cada vez más, los malos consultores, hacen que importe, lo menos importante.

Si hace años, cuando se implantaba una aplicación, lo importante era que el usuario pudiera utilizarla y se priorizara al máximo subir software para hacer que todo funcionase bien, ahora, eso no es lo importante. Lo importante es tener un plan de solución de incidencias, esto es, cuando un usuario tiene un problema, que llame para informar y a continuación, que se relaje, por que lo importante es que su incidencia está en el sistema, y se trata. La recepciona el departamento correspondiente, pone una fecha estimada de resolución, se la pasa al departamento que la soluciona, da otra fecha orientativa de resolución, que puede modificar la que pusiste, luego se libera el software, se pasa al departamento encargado de instalarlo, que dará otra fecha, que nuevamente puede retrasar la tuya,... En definitiva, todo está estudiado y planeado, que es lo importante, aunque el usuario esté con la incidencia tres meses, pues eso está en un segundo plano. Y estos absurdos son lo que, los malos consultores, preparan en las empresas, a las que convencen que eso es lo mejor y que así es como funciona el mundo.

Por nuestra parte, aunque nos llamen tradicionales, lo mejor es que cuando llegue una incidencia se resuelva, subas el software y si el cliente en 10' puede estar trabajando mejor, objetivo cumplido.

miércoles, 1 de julio de 2015

Ver el lado negativo

Es curioso cuando estás arrancando un proyecto, que normalmente salen incidencias, por muy depurado que lo lleves, cómo la dirección, sólo se fija en las que tienes abiertas, ya puedes tener en total 200 incidencias abiertas, que si todavía te quedan 100 por resolver, te machacarán porque no lo has hecho.

Una vez más, y sentimos decirlo, la dirección de las empresas no están a la altura de las circunstancias. Cuando se abre una aplicación nueva por primera vez, hay que tener claro que esa aplicación tendrá incidencias, que son completamente imprevisibles y lo que hay que hacer es poner a toda la compañía alineada, para resolverlas en el menor tiempo posible. Y también está claro lo que no hay que hacer, que es poner en tensión al equipo de desarrollo, por algo que se sabe y que resolverá lo más rápido posible.

Pero la dirección no es así, los "malos consultores", les venden una metodología que en el papel queda preciosa, pero en la práctica no funciona ni queriendo. Y claro, pasando por esa metodología, las incidencias se alargan en el tiempo y hacen que cada vez la pelota de incidencias, sea mayor.

Así que, cuando tengáis una implantación, poner la compañía completa al servicio del equipo de desarrollo, te ahorras mucho tiempo en discusiones que no llevan mas que a no resolver el problema.