viernes, 25 de marzo de 2016

No adaptarse

En más de una ocasión, hemos hablado de lo difícil que nos adaptamos a nuevas situaciones. Al ser humano, le cuesta mucho cambiar su rutina y, al final, hace muchas cosas, porque siempre se han hecho así y con ello, penaliza la evolución hacia mejores cosas, o al menos, mejor hechas.

Está pasando con los taxistas, ante la llegada del coche compartido, o con la fórmula 1, con los cambios en el reglamento. Ambos se revelan contra lo nuevo, en lugar de pensar en ¿cómo me puedo beneficiar de ello? Quizá, si se piensa en cambiar la forma de hacer las cosas, lo nuevo, no sea tan malo, e incluso, podríamos hacer negocio de él. Pero preferimos negarnos a aceptarlo y luchar contra lo nuevo.

Pensarlo, cuando llegan cambios, suelen llegar para quedarse, podremos luchar por evitarlo, pero es mucho mejor luchar, por aprovechar lo que nos ofrecen, en nuestro propio crecimiento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta lo que quieras, pero no lo uses para hacerte publicidad, o el comentario será eliminado.