Falta de información

Cuando pones a disposición de tus usuarios un software, lo menos que debes hacer es informar. Además esa información no debe ser escasa, es mejor pecar de pesado, que hacer que tu usuario no sepa hacer algo, porque no está bien explicado.

Algo así nos pasó ayer. Entramos en un samsung galaxy mini a la opción que revisa si tiene actualizaciones, desde samsung nos informa que así es y que si queremos descargarla. Con las mismas decimos que sí, la descarga, nos pregunta que si queremos instalarla, le volvemos a decir que sí y por último nos pregunta que tiene que reiniciar el teléfono que si lo hacía en ese momento, a lo que también respondimos afirmativamente.

Pues bien, el teléfono se reinició y apareció la típica pantalla de actualización de Android, con el robot verde delante de una caja blanca, de la que salía un flecha indicando que estaba actualizando algo. Más abajo una barra de progreso iba indicando lo que suponíamos que era el final de la actualización, pues bien media después de que la barra de progreso llegó al final, el móvil seguía sin hacer nada, lo que nos empezó a preocupar.

Fuimos a probar el conectar el teléfono al PC por si la aplicación de samsung podía hacer algo por el teléfono, que parecía acabado. Arrancamos la aplicación del PC de samsumg, Kies, nos dijo que no estaba actualizada a la última versión, por lo que la actualizamos y una vez actualizada, la reiniciamos. Nos volvió a informar que le faltaba por actualizar otro fichero y lo hicimos. Mientras tanto (menos mal), el teléfono dio señales de vida, se apagó y se volvió a encender, tardó unos cuantos minutos en arrancar y al fin nos pidió el pin de la SIM. Hizo mil tonterías, pero sin parar de moverse, lo que te hacía ver que algo estaba funcionando. Al final mostró una pantalla indicando que todo había funcionado correctamente.

Y aquí, después del susto, es lo que motivó escribir esta entrada, ¿tan difícil le es a samsung informar que va a tardar casi tres cuartos de hora en actualizar el terminal? De hacerlo así, no nos habríamos preocupado y no habríamos casi cometido el error de conectarlo al PC, o quien sabe si quitar la batería, al pensar que el equipo estaba "tostado".

De verdad, cuando tengáis usuarios al otro lado, informarles, no cuesta nada y les tendréis mucho más tranquilos.  Es cierto, como hemos dicho al principio, que podemos pecar de pesados, pero  quedarse cortos,  os aseguramos, es mucho peor.