Muchas veces hemos comentado la falta de tiempo que tenemos, y es que, por mucho que queramos, los días tienen sólo 24 horas. Si unas 10 o 12 las dedicas a trabajar (o buscarlo), te quedan otras 12, para dormir, comer, aseo, etc... por lo que para hacer cosas, hemos calculado que tenemos unas tres horas al día y, como bien sabéis, pasan volando.
Al final, si tienes aficiones varias, lo que haces es quitarlo de lo único que puedes hacerlo, el dormir. Si te tienes que levantar a las 6:30, aunque te acuestes a las 4:00, en dos horas y media, estarás en pie y al día siguiente arrastrado, pero lo harás.
Así que, lo que se debe intentar es gastar el tiempo de otro sitio y nosotros proponemos, que se lo quitemos al trabajo, ya que en muchos casos, es un tiempo bastante inútil, sobre todo, si trabajas para una empresa grande, donde la mayoría del tiempo, se lo lleva en justificar qué estás haciendo, algo totalmente incomprensible, pero que pasa cada día. Al final, cuando llega tu hora de salida, es cuando te dejan en paz y te tienes que poner a hacer tu trabajo, el que vale, de ahí que hagas 10 o 12 horas de trabajo, en lugar de las ocho reglamentarias.
Así que hay que intentar hacer tus ocho horas de trabajo y punto, ganando así cuatro horas más a lo que realmente necesitas, que es, tu tiempo.
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