Ahora que se acerca el final de año es, cuando muchos seguros, que tienen su renovación anual, envían a los clientes, su nueva prima. Por norma general, suele ser al alza, lo que hace, que al cliente y más ahora, le duela.
Debido a esto, es por lo que titulamos la entrada, "igual nos duele menos", y es que, acompañando a la pertinente subida, tenemos también una extensa carta, en la que se explica lo magnífico que es el seguro que tenemos contratado, los beneficios que te da, y, como no, lo caro que es, para lo que te cuesta.
Entendemos que quien hace eso, lo hace, porque le asesoran que es mejor hacerlo así, ya que el cliente es idiota y pagará contento lo que le pidas. Lo que no se dan cuenta, es que, poco a poco, los clientes empezamos a despertar y estamos hartos de que nos regalen los oídos, única y exclusivamente, para clavarnos. Y lo hacen todos, los seguros con sus primas, el panadero con el pan, el político con los impuestos, etc.
Esperamos que, poco a poco, esto vaya cambiando, aunque muchos piensen que es imposible, de manera que el mando de las cosas lo tenga, quien lo tiene que tener, esto es, el cliente.
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