La tecnología está cada vez más metida en cualquier tipo de trabajo, además, como no puede ser de otra manera, avanza muy rápidamente, lo que obliga a cambiar las herramientas, en cada oficio las suyas, con cierta frecuencia.
Y el cambiar las herramientas, lleva implícito perder algo de eficacia en el trabajo, ya que hasta que te acostumbras a la nueva, rindes mucho menos. Y en este punto, creemos que avanzar con la tecnología, nos permite ser más eficientes, que hacerlo a nuestro ritmo. Y es que, no es lo mismo saltar de un Windows XP a un Windows 10, de un golpe, que pasar por los intermedios.
Es cierto que el coste de cualquier cambio tecnológico es alto, pero ¿cuánto te ahorrarías si el cambio es progresivo y no a saltos? Eso es lo que tenemos que evaluar y dar los saltos o progresivamente, o realmente a saltos.
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