sábado, 19 de septiembre de 2009

Nostalgia

A los que somos técnicos, nos encantan los cacharros. Sea el que sea, lo guardamos. Luego se queda guardado, por los siglos de los siglos, pero sabemos que ahí está. Por eso nos cuesta tanto despojarnos de nuestro viejo PC, por ejemplo. Le das la utilidad que sea, con tal de no tirarlo, que si es que lo tengo para machacarlo con los P2P, que si es que me hace de servidor de impresión, que si me sirve de microondas, lo que sea, pero que no salga de casa.

Ya más curioso es el caso de los que cambian de PC, se llevan toda la información, pero el otro no lo tocan, no vaya a ser que me haya dejado algún fichero. Esto, hemos de reconocer, que no lo hacemos, pero conocemos casos.

La verdad es que habría que deshacerse más a menudo de las cosas, en general, y de la tecnología, en particular. En primer lugar, porque ocupan mucho espacio y luego, porque normalmente lo que dejas, por otra cosa, normalmente, se dedica a llenarse de porquería. Así que nuestro consejo de hoy, cuando te vayas a comprar algo, piensa qué es lo que va a sustituir y en cuanto lo compres, tira el viejo, no te arrepentirás.

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