Seriedad

En todos los aspectos de la vida, la seriedad es un grado. Si alguien hace algo, debe hacerlo con todas sus consecuencias y no intentar pasarle el problema, creado por él, a cualquiera que pase por allí, eso no sería serio.

Una vez más toca hablar de los directivos de este país, una gran parte de ellos, no son serios y sus carencias, las derivan en sus subordinados, aunque estos no sean los responsables, sino ellos.

Cuando alguien quiere ser director, no debe serlo a cualquier precio, pasando por encima de compañeros y aprovechando la mínima oportunidad, para echar pestes de sus compañeros y hacerse con el ascenso. Debería ascender por sus méritos, haciendo gala de lo bien que gestiona los problemas, convirtiéndolos en éxito.

Pero en España, muchas veces, los que obtienen un ascenso, lo hacen porque han conseguido hacer ver a sus superiores, que el resto son peores que él, aunque no sea así. Esta política, hace que el que obtiene el ascenso no lo merezca. Y de ahí, que el nivel directivo, en muchos casos, sea muy malo.