Cacheados

En verano, todos solemos tener más tiempo libre, hay más horas de luz, aprovechas para hacer cosas, que en invierno no hacer, como pasear o montar en bici y además, si tienes algo roto, te por arreglarlo. Y aquí en donde, además, aprovechar para innovar y poner soluciones "raras" a las cosas. Y claro, una solución rara, pasa por pasear por una tienda, sólo para mirar, intentando encontrar, la pieza que nos servirá.

Y claro, pasear por una tienda, tiene sus riesgos. En concreto buscábamos una solución, para poner el manillar de unas bicicletas, un poco más alto. Como hacía mucho calor por la tarde en casa, nos fuimos al Decathlon. En verano, y con el calor que hace, en casa estás con un bañador y unas chanclas, y para ir al Decathlon, obviamente, no te pones más que una camiseta. Así que allí nos presentamos, con las camisetas, sin afeitar, en bañador y chanclas. Nos fuimos a la zona de bicis, mirando cada uno por una zona y buscando algo que nos sirviera.

Después de mucho buscar, encontramos una pieza que podría servir, pero que estaba fuera de su embalaje, la cogimos y seguimos buscando, bien a un vendedor, bien una pieza con caja, para ver lo que valía. No encontrábamos ni lo uno, ni lo otro, pero sí apareció una persona de seguridad que nos preguntó, si la pieza era nuestra. Le explicamos lo que nos pasaba y nos dijo que delante de nuestras narices, estaba el producto, así que le dimos la que no tenía caja al de seguridad y nos quedamos con la otra. Al final encontramos al vendedor que nos explicó para lo que servía y nos confirmó el precio. Como nos pareció muy caro, lo dejamos y nos fuimos. Al salir, salió de nuevo en de seguridad detrás de nosotros, pidiéndonos que abriésemos la bolsa que llevábamos, con la cartera, llaves y demás. Así lo hicimos y, como era de esperar, no encontró nada.

¿Porqué salió tras nosotros el de seguridad? No lo entendemos bien, la única explicación que se nos ocurre, es que pensase que nos había pillado quitando el envoltorio al primero y que cuando se dio la vuelta, volvimos a hacerlo y lo guardamos en la bolsa. En definitiva, sea como fuere, el caso que es las pintas y las vueltas que des en una tienda, hacen que a los de seguridad les salten las alarmas, seguro que yendo con traje, por muchas vueltas que diésemos, no nos habría cacheado. Pero bueno, ha sido toda una experiencia.