Educar al cliente

Los clientes son la base de las empresas, si no se tienen clientes, no se tienen ingresos y las empresas deben cerrar. Ahora bien, eso de que el cliente siempre tiene la razón, no siempre es así, pero no puedes decírselo, porque se tiene que sentir único.

Por eso, dentro de las empresas, aquellas personas que son capaces de tratar bien a los clientes, sin que lleguen a perder dinero, por darles en exceso, son bastante valoradas. De hecho, en muchas ocasiones, para darle algo a un clientes, primero se lo tienes que "quitar". Lo entrecomillamos, porque no les quitas nada, simplemente le alejas sus expectativas, sabiendo que las puedes cumplir, de modo que cuando ya acepta que algo se lo hagas lejos de cuando él quiere, pero sabes que puedes hacerlo antes, consigues animarle, entregándolo antes, de modo que finalmente cumples sus expectativas, lo que le da tranquilidad.

Y es muy sencillo (o complicado), tener ese tira y afloja, de manera que el cliente esté contento, aunque a veces tenga que aguantar que no se hagan las cosas, exactamente como ellos quieren, pero teniendo esa cuerda siempre poco tensa, de manera que no se rompa.