Cero estrés

Aunque la empresas se empeñen en crear tensión absolutamente por todo, nuestro objetivo siempre debe ser tener cero estrés. Eso, dicho así, parece algo sencillo, pero para nada lo es. Y es que el estrés no sólo depende de la presión que ejerce la empresa, depende mucho de tu situación en la vida, si puedes permitirte perder el trabajo, si te sientes acosado con facilidad, si aguantas la presión,... por eso, decirlo es fácil, pero hacerlo no.

Y ahí, al igual que ayer nos quejábamos de la subcontratación, es donde el estado sí debería legislar, de manera que no se pueda apretar a los trabajadores, hasta el punto en que afecte a su salud. Pero claro, para eso, lo que hablamos ayer influye mucho, ya que puede que tu empresa no te presione, pero el cliente para el que trabajas, que no es tu empresa sí y aunque tu empresa no te exija hacer horas, al final, en el cliente te veas obligado a hacerlas, porque si te echa, en tu empresa harán lo mismo y claro, denunciar a alguien, que no te tiene contratado, no es sencillo.

Por eso, aunque sea difícil, debes intentar no estresarte y si te echan, pues igual hasta tienes suerte, porque eso que te quitas hace que te muevas a un lugar mejor. Así que, piénsalo y si te estresa en exceso tu trabajo, tómatelo con calma y provoca que se atrevan a echarte, quizá sea mejor el remedio,  que la enfermedad.