Podemos seguir echando la culpa del gran problema que tenemos con el maldito virus, a los políticos, nacionales, internacionales o locales, pero no nos damos cuenta, o no queremos hacerlo, que la culpa es absolutamente nuestra.
Leímos el otro día que se critican campañas duras, en las que alguien dice que mató a sus padres, porque les contagió el virus y efectivamente, la campaña es dura, pero no falsa. Lo que pasa es que nos duele reconocer, que la culpa, no siendo directamente de uno mismo, que no tiene ningún interés en contagiar a nadie, lo es indirectamente, porque es portador del maldito virus.
Y la pena de esto, es que el virus no hace distinciones de nada, sólo busca un huésped en el que poder transportarse, para infectar a otros. Y por eso, por la irresponsabilidad de unos pocos (franceses que vienen a España a hacer lo que allí no se puede, médicos que dan resultados de PCR negativos y en general cualquiera que se pasa las normas por el forro), otros, que sí lo están haciendo bien, o al menos lo intentan, resulta que recogen el maldito virus y se lo llevan a su casa, infectando a sus seres queridos, los cuales puedes que no les ocurra nada o que les ocurra lo peor.
Por eso, como decimos muchas veces, creemos que somos una sociedad muy inmadura, que se ampara en normas, leyes,... para hacer las cosas y en "trampas", para poder saltárselas, sin mirar más allá de su bienestar, haciendo que, por el camino, muchos se dejen la vida, por la poca empatía de unos pocos. Y esto ocurre, porque, como hemos dicho, el virus, que no hace distinciones de si estás haciendo bien las cosas o no, resulta que se mete en la vida de los que lo hacen bien y la destroza.
Ser responsables y no hagáis las cosas o dejéis de hacerlas, porque una ley lol prohíba o no, hacerlo porque es lo que toca y estamos muy cerca, de tener una inmunidad, gracias a las vacunas, que quizá sí nos haga salir de esta.
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