Y después de tanta expectación... terceros

¡Vaya final la de Eurovisión! donde España ha obtenido un tercer puesto el mejor en muchos años, lo que hace ver que mezclar política y cultura, no es buena idea. Y es que, si muchos querían que fuesen a Eurovisión otras canciones, cuando los expertos en música, recomendaban que fuese Chanel, ha quedado demostrado, una vez más, que saber lo que se mueve en un entorno, te coloca en buenas posiciones.

Nos alegramos un montón por Chanel, que hizo una defensa espectacular de nuestro país, cantando y bailando, sin perder nada de voz, ni de baile, algo que nos parece absolutamente imposible.

A ver qué ocurre en próximos años, lo que está claro es que, mandar canciones reivindicativas, en idiomas poco internacionales y con gustos muy particulares, no es la forma de quedar arriba, eso sí, si dejas hacer y crear a personas que están ahora dándolo todo, consigues un tercer merecidísimo puesto, que, de no ser por la guerra de Ucrania y no sabemos que vieron a Reino Unido, habría ganado, sin ninguna duda.