jueves, 23 de agosto de 2018

Complicar lo sencillo

Estamos completamente locos con la tecnología. El otro día estuvimos haciendo unas grabaciones con una cámara deportiva y al ir a copiar los archivos al PC nos dimos cuenta que no podíamos leer la tarjeta, ya que no teníamos el adaptador. Total, como la cámara crea una red WiFi, la pusimos y no podíamos descargarlo, porque había que hacerlo desde una APP para móvil, luego pensamos que sería más rápido, poner la tarjeta de la cámara, en el móvil y de ahí al PC, tampoco podíamos porque no teníamos un pincho a mano, para abrir el compartimento de tarjetas del teléfono, así que estuvimos dándole vueltas a cómo hacerlo hasta que uno dijo, ¿y si lo conectamos por cable? Y a la primera teníamos una unidad de disco, como se ha hecho siempre, desde que existen los USB.

Y es que, cuando tenemos varios caminos para hacer algo, siempre buscamos el más complejo y por su puesto, si es inalámbrico mucho mejor. Y hacer eso, nos nubla la vista a las cosas que siempre han funcionado y que, por lo general, no fallan ni te obligan a hacer cientos de tejemanejes, para llegar a la misma solución.

Así que pensar en lo antiguo, cuando os surja un problema, ya que quizá (en la mayoría de los casos será así), será la solución más rápida y barata que encuentres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta lo que quieras, pero no lo uses para hacerte publicidad, o el comentario será eliminado.