sábado, 27 de octubre de 2018

Exceso de democracia

Vaya por delante, que el titular no significa que queramos dictaduras, porque no es así, pero sí que la democracia, en muchas ocasiones, hay que ponerle un poco de límite. Ahora estamos en Europa con el lío de la supresión del cambio de hora. Se hizo una encuesta (para eso está la democracia), y salió que, a los europeos, no nos gustan los cambios de hora, por lo que ahora toca la parte de apartar la democracia y llevar a cabo la orden de suprimirlos. Pero no, dejamos a los estados miembros que cada uno decida dónde quedarse y es donde se monta el lío.

En nuestra opinión, una vez los europeos deciden dejar de lado el cambio horario, les toca a los que gobiernan Europa decidir cómo hacerlo y, en nuestra opinión, es muy sencillo, según los husos horarios, a cada uno lo que le toque y en los países que les correspondan varios, que se tome en todo el país, la hora del huso horario en el que tenga más territorio. Con una decisión de éste estilo, se acaban los problemas. Ahora si dejamos que cada uno opine, que es lo que han hecho, se monta el lío.

De hecho, en España, que tenemos tres husos, uno para Cataluña e islas Baleares, otro para la península, Ceuta y Melilla y un tercero para Galicia e islas Canarias, podríamos decidir aplicar los tres, lo que, en nuestra opinión, sería un poco lío a la hora de coordinar negocios, etc... pero tampoco sería descabellado hacerlo así.

En definitiva, que la Unión Europea debería ordenar como estime, poner una fecha y todos los países a funcionar.

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