Por regla general, las empresas, buscan negocios redondos, donde, con la mínima inversión, se obtenga el mayor rendimiento. Si ésto lo llevamos a las personas que quieren dar un "pelotazo", entonces el negocio está en ganar dinero sin arriesgar nada y ahí es, donde muchos, se aprovechan de unos pocos que, también por regla general, no se enteran del "timo" al que están siendo sometidos.
Y los timos no son otra cosa que, convencer a quien tiene la materia prima (una producción, un terreno, un inmueble,...) de que contigo va sacar más rendimiento a la mismas, que si lo hace sólo o con cualquier otro. Al final, la materia prima la pone uno, lo compra otro y por el camino le caen al que está en medio un porcentaje. Como hemos dicho al principio, ni se la juega con el sacar adelante la materia prima, ni se la juega invirtiendo en ella, simplemente se lleva limpio un trozo del pastel.
Y como hemos dicho alguna vez, la culpa de la existencia de éstas personas, es que los que tienen la materia prima y los que la compran, no se paran a pensar en lo que se ahorrarían si se hablan entre ellos. Sobre todo, el que produce, ya que es el que más arriesga. Al fin y al cabo el intermediario, si no sale el negocio, se queda como está y el que compra, si falla la materia prima, también se queda igual, pero el que tiene que sacar adelante la materia prima, es el que se gasta el dinero, para luego, con suerte, ganar un poco.
Así que si tienes materia prima, arriésgate y vende directamente al consumidor final, seguro que sacas mucho más, que con tanto intermediario que sólo se aprovecha de tu esfuerzo.
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