Entendemos que al presidente del Gobierno de España, le dé pavor tener que responder a los periodistas en directo, con lo fácil que es que te manden las preguntas, sin tener claro lo que vas a contar, para que tengas tiempo de preparar las respuestas y además, ahorrándote la réplica.
Pero aunque lo entendamos y tengamos claro que la situación que está manejando es muy compleja, es algo que no debe evitar como está haciendo. Nos alegra leer que van a ha cambiar el paso y ante varias quejas de medios y asociaciones, va a permitir esa interacción, entre periodistas y "ponentes".
Esperamos que con ello, se acaben los mítines que nos está dando cada sábado y que no tienen ningún sentido, más allá de dejarse ver. Hemos visto los primeros y hemos dejado de hacerlo, porque se lía a dar vueltas sobre la misma idea demasiado tiempo. Parece más una estrategia de distracción, que de información.
En momentos de crisis, lo mejor que se puede hacer es informar, de forma clara y concisa, sin rodeos y explicando las cosas. Y luego, aceptar preguntas de los medios de información, contestar y aguantar las réplicas. Hacerlo de cualquier otra forma, da sensación de descontrol y de no tener claro lo que se tiene que hacer, de ahí, el sufrimiento, como se ve en la imagen que acompaña la entrada, cuando aparecen los micrófonos con preguntas "inesperadas".
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