No hay nada como darle a un botón y que alguien limpie la casa por ti y eso, básicamente, es lo que se supone que hacen los robot aspirador, friegasuelos, cortacésped,... El problema viene, cuando miras cómo te ha dejado, aquello que pretendía limpiar. Y es que, por muchos sensores que les pongan, por mucha inteligencia artificial que tengan, donde esté una persona, difícilmente va a llegar un robot.
La razón de esto es muy simple. Un robot funciona a base de instrucciones que va cumpliendo, una detrás de otra, por lo tanto, no se va a ir modificando en base a "veo una mota de polvo por el rabillo del ojo y allá que voy a limpiarla", porque afortunadamente, el ser humano tiene infinidad de sensores, que es difícil replicar en un robot, así como una forma de pensar, que tampoco hemos conseguido replicar.
Y esto, diréis, ¿cómo los decís vosotros, que tanto defendéis la tecnología?, pues lo decimos, precisamente por que sabemos de tecnología y las limitaciones que tiene. De hecho, al igual que los coches autónomos podrán funcionar con 0 accidentes, sólo si todos los coches lo son y comparten esa información, porque en cuanto exista una persona circulando, es tan variable lo que puede hacer, que habrá accidentes, por una variable, que no esté programada.
Así que seguiremos con nuestro robot aspirador, para el día a día, pero de vez en cuando, habrá que coger la aspiradora tradicional y ponerse serio con la limpieza, si no quieres acabar comido por las "pelusas esquineras" que va dejando el robot.
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