Hay personas a las que les encanta ser misteriosas, siempre cuentan las cosas a medias, siempre tienen una noticia más que no pueden desvelar, siempre para tomar decisiones, le dan un cierto aire de sí, pero no,... en definitiva, que se pasan la vida en un estar y no estar, que es muy complicado tratar con ellas.
Y es que, como dijimos el otro día, la mejor manera de funcionar en todos los sentidos, es ir con la verdad por delante y de cara, aunque te la partan, pero todo aquel que va por la vida, con medias tintas, puede que se vaya librando, pero antes o después saldrá trasquilado.
Además es complicado trabajar con personas así, porque nunca sabes en qué momento te va dejar tirado, a pesar de asegurarte que no lo haría. Y de hecho, cuando te deje tirado, te contará su teoría de que te dejó tirado porque pensaba que no sería decisivo y así, a otro con el que también estaba a medias tintas, le decía que sí.
Son personas de poco fiar, que no por ello son poco trabajadoras, pero la verdad es que, trabajar a su lado, desgasta mucho más que trabajar con alguien que va de cara. Entre otras cosas, porque tienen que pensar que cualquier cosa, puede salir, como te dice, o como lo que oculta, por lo que tienes doble trabajo, permanentemente.
No seáis misteriosos, porque para lo único que va a servir, es que para que acabéis apartados, porque nadie os quiera tener en su equipo.
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