Último día del curso

Pues sí, hoy, es el último día del curso, ya que, a partir de mañana, muchos tendrán jornada intensiva, hasta el 31 de Agosto, lo que hace que, los dos meses que llegan, sean meses de trabajo tranquilo. No sólo por la jornada intensiva, también por las vacaciones. El único problema, son los descerebrados, que en estas fechas, inician proyectos, para finalizar después del verano. Para esos, les auguramos, un proyecto cargado de retrasos y que terminará, en la fecha que sea menester, ya que no habrá tiempo material y la gente necesita vacaciones, necesita descansar, desconectar del trabajo, por lo que hacer un proyecto, en estos meses, es harto complicado.

En muchas empresas, sobre todo en Agosto, si se lo pueden permitir, cierran por completo el negocio, ya que ganan más dinero cerrando, que teniéndolo abierto, por lo que no les compensa.

Así, que si estás de vacaciones disfruta, si las empiezas mañana, prepárate a disfrutarlas y si eres de los que te han dado un proyecto estrella(do), prepárate a sufrir, ahora bien, piensa si te compensa ese sufrimiento, o directamente, lo que tienes que hacer es pasar de ellos, pasar tus vacaciones lo mejor posible y a la vuelta de las mismas, veremos que tocará hacer.

Sin sorpresas

Patunes 0 - MMDigital Club de Fútbol 7.

Tal y como estaba previsto, hemos ganado a Patunes, un equipo abandonado, buscando a alguien que quiera revitalizarlo. Este resultado, nos sitúa a nueve puntos del segundo, contra el que jugamos en dos semanas, y como quedan tres partidos para finalizar la temporada, esto es nueve puntos, debemos, al menos, ganar uno de ellos, si queremos ser campeones y ascender directamente. Por lo tanto, todavía queda mucha liga y luchar por quedar los primeros de la tabla.

Afrontamos con ganas el final de la liga y hemos recuperado a toda la plantilla, por lo que esperamos, seguir la misma línea que hemos tenido. La afición está con el ánimo por las nubes y anima como nunca en el estadio, lo que hace que el equipo rinda mejor. Gran parte del mérito de esta temporada, es precisamente gracias a la afición, que está deseando, como nunca, ver jugar a su equipo, cada fin de semana.

Aires de grandeza

En las empresas, hay muchas formas de ascender y una de ellas, es ir escalando, vamos a llamarlo, por visión. Nadie te asciende, pero te dejas ver. Te dejas ver en reuniones que no te corresponden, te dejas ver en sitios que no son los tuyos naturales, te cambias a un sitio, más de directivo que de tu cargo, en definitiva, sin ser jefe, haces ver que lo eres y, al final, de mucho aparentar, alguien va y te hace jefe.

Quizá, esta forma de ascenso, que es más común de lo que parece, es una de las razones, por las que la dirección en España es tan mediocre, ya que la gente no asciende por sus méritos, si no por sus aires de grandeza. Ya lo decía Jesucristo (Lucas 14, 7-11):

Observando a los invitados, cómo escogían los primeros asientos a la mesa, refirió una parábola diciéndoles: 

Cuando seas invitado por alguien a una fiesta de bodas, no te sientes en el primer lugar; no sea que otro más distinguido que tú haya sido invitado por él, y que viniendo el que os invitó a ti y al otro, te diga: "Da lugar a éste", y luego comiences con vergüenza a ocupar el último lugar. 

Más bien, cuando seas invitado, ve y siéntate en el último lugar; para que cuando venga el que te invitó, diga: "Amigo, sube más arriba." Entonces tendrás gloria delante de los que se sientan contigo a la mesa. 

Porque cualquiera que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.

Y es lo que les debería ocurrir a estas personas, que se auto ascienden para escalar, no por su trabajo, si no por sus formas. Al final, tenemos direcciones mediocres, que lo que hacen es hacer empresas mediocres. Aunque estamos seguros que, al final, el tiempo, pondrá a cada uno en su lugar.

Hacerlo o delegar

En los proyectos, cualquiera que sea, puedes optar por coger el toro por los cuernos y hacerlo con el equipo en el que estás, o bien, delegarlo a otro equipo, de manera que sólo os toque coordinar. Pero, ¿qué es mejor?

Sinceramente, no se puede asegurar que lo mejor sea que lo hagas tú mismo, ya que tienes el control total, puedes hacerlo en menos tiempo, echar horas, etc... Y tampoco podemos asegurar que sea mejor que lo hagan otros, ya que la responsabilidad es suya, tú sólo coordinas, etc...

Ambas soluciones tienen sus pros y su contras que, además, dependiendo de muchos factores, en unos momentos nos decantarán por un tipo de desarrollo del proyecto y en otros por otro.

En nuestra opinión, siempre que un proyecto, tengas responsabilidad absoluta sobre él y te pidan cuentas del mismo, viendo que es imposible realizarlo, en las condiciones que te han pedido, lo mejor, es delegarlo, de manera que cuando te pidan cuentas, si no está hecho, puedas disculparte, incluso pasarle la responsabilidad, a otra parte. Ahora bien, si va con tiempo, tienes claro lo que hay que hacer y puedes hacerlo, lo mejor es centralizarlo en tu equipo, ya que, como decíamos antes tienes mucho más control.

Lo malo de esto, es que, lo que sea mejor (o peor), no lo vas a decidir tú, si no que te vendrá impuesto, por lo que si es proyecto no tiene posibilidades, lo mejor es que te prepares para sufrir y aguantar el tirón, porque no saldrá y no podrás hacer nada por evitarlo.

Pasarse de la raya

En las empresas de servicios, por más que nos vendan lo contrario, los trabajadores importamos bastante poco. Tan es así, que en nuestro entorno ya vamos viendo empresas, que piden solidaridad a sus trabajadores, para evitar medidas mayores, bajándoles el sueldo. Si a esto le unimos que el gobierno, por mucho que diga que no, el cambio de impuestos ha dado de lleno en las clase media, tenemos cada vez menos poder adquisitivo y los gastos iguales o mayores.

Por otro lado, vemos en las empresas, muchísima gente que no aporta dinero a la misma. Cuando las cosas iban bien, añadieron muchísima gente para liberar de trabajo a otros y ahora que van mal, de ahí, es de donde no recortan, teniendo que recortar, de los que sí aportamos.

La economía de la empresa, lo hemos dicho muchas veces, es como la economía familiar. Cuanto te tienes que apretar el cinturón, no puedes hacerlo de tu comida, que es indispensable, tienes que hacerlo de gastos superfluos, coches, viajes, casas, etc... y en última instancia, de la comida. Pero en las empresas de servicios, lo primero que atacan es a los trabajadores, los que están en un cliente y le traen la comida. Si te cargas eso lo primero, al final, te quedarás sin nada, porque el resto, no te lo puedes comer, por mucho que quieras. Recorta en gastos superfluos, quita coches de empresa, bonus, viajes innecesarios, etc... y cuando no quede otra, toca a los trabajadores, pero, si lo haces bien, salvarás el bache, sin cargarte tu mano de obra, que es lo más importante.

Nosotros sólo escribimos en un blog, que, sinceramente, lee muy poca gente, pero esperamos que alguno, sea capaz de entender lo que explicamos, o al menos interesarse por ello, y con que una sola empresa, no haga una barbaridad y cambie su forma de pensar, por la que creemos que es la correcta, y además, le funcione, nos damos por satisfechos. La pena, es que ninguno, nos lo contará, a pesar de tener los comentarios activados y animaros siempre a hacerlo.

El desprecio por los demás

Ayer vivimos un momento de desprecio más, dentro de la compañía, por parte de un directivo, lo que nos demuestra, lo mal preparados que están en España, algo que, por otro lado, no nos sorprende.

Resulta que después de llevar haciendo las cosas, en contra de lo que el equipo técnico le aconsejaba, durante varios meses. Ahora, justo cuando llega la época más "tranquila" del año, con las vacaciones, los clientes de vacaciones, en definitiva, con poca carga de trabajo en general, decide hacer, lo que llevamos desde el equipo técnico avisando que había que hacer. Pero claro, cuando lo avisamos, era a principio de año, que teníamos tiempo de reacción, y no ahora. Además, no sólo lo pide, si no que da tres meses para hacerlo, esto es, el verano. Y cuando se le comenta, que es mala época y que la gente tiene sus vacaciones, su respuesta es simple, ese es vuestro problema, yo me voy todo el mes de Agosto.

Ese desprecio, por el trabajo del resto, ese desprecio por no asumir que se equivocó y que estará el tiempo que tenga estar, en definitiva, ese comportarse como un villano de la edad media, es lo que vemos, con demasiada frecuencia, en las empresas, lo que no tiene sentido, ya que lo único que consigue, es enfadar mucho al personal y, por lo tanto, no conseguir el objetivo perseguido.

Se oye muchas veces, que pasan menos cosas de las que deberían pasar, y es cierto, ya que algún día, cuando a alguien se le cruce un cable y le traten de esa manera, se le irá la mano y alguno pensará que perdió la cabeza, cuando la realidad, es que se hartó de que le ninguneasen.

Convivencia

La convivencia es sencilla, "tu libertad acaba, donde empieza la del vecino". Respetando eso, la convivencia es sencilla, el problema viene, cuando alguna de las partes, piensa que su libertad, va más allá de donde empieza la del otro.

Un ejemplo fácil de convivencia, es vecinos que tienen plantas, cuando las plantas de uno de ellos, invaden las del otro, éste, tiene todo el derecho del mundo a solicitar que las quite, ya que no son suyas, ni quiere tenerlas. Si el que tiene las plantas, piensa que está en su derecho, porque él las planta, y luego ellas deciden dónde ir, está equivocado. De hecho, en este ejemplo, se ve claramente donde acaba la libertad de uno y empieza la del vecino y es, en la valla de separación.

En otros ámbitos, las cosas son más complicadas, ya que, por ejemplo en el trabajo, dónde empieza la libertad de uno y de otro, en las tareas encomendadas a cada uno, en que el proyecto salga bien. Dependiendo de cómo se vea, quizá alguien puede pisar el trabajo de su vecino, si con ello, el proyecto funcionará mejor. Pero claro, si el que tiene que hacer un trabajo, se lo quita su vecino, por mucho mejor que vaya el proyecto, está pasando por encima a su compañero, lo que no está bien.

Por eso, en el trabajo, la convivencia se basa en que las cosas funciones bien, que el proyecto marche sobre ruedas y que entre los compañeros, el trato sea correcto, cualquier cosa que se desvíe de esto, será una mala convivencia por parte de quien lo genere.

Para terminar, sólo decir, que tener buena convivencia con tu entorno, te traerá más alegrías que tristezas y con esa buena convivencia, conseguirás más cosas, que estando permanentemente enfadado con el entorno.

Saltarse las normas

Un buen día, estás trabajando y te invitan a una reunión para lanzar un proyecto. Miras las directrices de la compañía a la hora de lanzar un proyecto y te das cuenta, que el que la convoca, no tiene que hacerlo y mucho menos de la manera en que lo hace.

Cosas como esta, pasan muy a menudo en las empresas, ya lo hemos dicho alguna vez, los altos mandos, se saltan a la torera, las normas que ellos mismos ponen y, cuando les conviene, obligan a cumplir. Pero si son ellos los que tienen que cumplirlas, la cosa cambia.

En este aspecto, lo único que podemos hacer, con mucho riesgo, es sacar la normativa de la compañía y obligar a que se hagan las cosas, como ahí se dice, de esta manera, los directivos, probarán su propia medicina.

Decimos que hacer esto, tiene mucho riesgo, porque, nos guste o no, la sartén la tienen ellos por el mango y dejarles en evidencia, puede implicar que tú te quedes sin trabajo. Pero es cierto, que deberíamos hacerlo y llegar lo más alto posible, para, con un poco de suerte, llevarte por delante a un director, que, si ve peligrar su puesto, no dudará en echarte a ti la culpa, para que caigas en su lugar.

Una vez más, vemos que es imposible hacer que las cosas cambien en este país, ya que los directivos siguen pensando que las empresas son sus dominios y que pueden hacer las cosas, como les venga en gana. Además, si tu no rindes, como ellos esperan, no dudan en recriminarte, que no eres capaz de hacer las cosas. Claro, que lo que obvian, es que ellos se saltan todas las normas y a ti, no te queda más remedio que acatarlas.

Primera final ganada

Alzira Falcons 0 - MMDigital Club de Fútbol 5.

Con nuestra victoria en esta primera final y gracias a que Satis999, ha ganado a algiros cfv, hemos conseguido ponernos a nueve puntos del segundo y tercero en la la tabla y, aunque las posiciones de los equipos no han variado, hemos dado un salto importante de cara a finalizar bien la temporada, ya que el ascenso sigue siendo posible.

La próxima semana jugamos contra el último, que además sigue abandonado, por lo que esperamos llevarnos los tres puntos y tener al equipo descansado, de cara a los tres últimos partidos que son, contra los actuales cuarto, tercero y quinto, lo que hace que tengamos que esforzarnos por conseguir ganarles.

Los aficionados están encantados, ya que en este partido no esperaban tener una victoria tan abultada, pues es uno de los mejores de la liga. Esperamos seguir dándoles alegrías lo que resta de temporada, lucharemos por ello.

Aprovechar los resquicios

Cuando tienes algún tipo de proyecto, en el que compartes la dirección del mismo, si tu parte se lleva correctamente, pero la de tu "socio", no, corres el riesgo de que te arrastre, ya que el proyecto es común. Por lo tanto, en caso de fracasar, puede que tu carrera, sea cortada, por asociarte con el proyecto y no con tu trabajo. Por eso, cuando tu entorno evalúa el proyecto, debes estar muy atento a los resquicios que te dejen, para salir airoso de la quema.

El entorno, al final, es que valorará individualmente a cada parte del proyecto, por lo que a sus ojos, debes ser el que saca adelante el proyecto y no el que deja que se hunda. Y el entorno, por regla general, aunque dé palos al proyecto, siempre deja resquicios, en lo que cada parte debe posicionarse, de modo que la que lo está haciendo bien, se salva de la quema y la que lo está haciendo mal, se hunde más todavía. Y hay que saber aprovecharlo.

Los resquicios que nos dejan, simplemente son el permitir posicionarte, en contra de tu "socio", de manera que sea él que el que tenga que mover ficha y por tanto, al que le caerán los palos, eso sí, por tu parte, de buen rollo, pero al final, le estarás dando un palo.

Sabemos que no es fácil, ya que aprovechar esos resquicios, en muchas ocasiones conlleva "pelearte" con la otra parte del proyecto, pero es fundamental hacerlo. Obviamente, hay que hacerlo, evitando en todo momento un enfrentamiento directo con la otra parte y, siendo malos, intentando quedar como amigos (de ahí, lo de dar palos con buen rollo), ya que con quien trabajas día a día, es con ellos.

Cuando necesitas un descanso

Llega un momento, en que las tensiones del trabajo, la falta del mismo, los problemas que tienes alrededor, en general, tu estado de ánimo, necesita que te des un descanso. Y ese descanso, a la fuerza, tiene que pasar por abandonar tu rutina habitual, para hacer algo completamente distinto, que permita a tu mente descansar.

No es algo sencillo, si tienes trabajo, necesitas que te den vacaciones, si no lo tienes, necesitas dinero para hacerlo, y en muchos de los casos, el cambio de la rutina es, poco menos que imposible. Por eso, es muy importante tener cosas que hacer en tu tiempo libre, de esa manera, la mente descansa en cosas que no son las habituales, dando ese descanso, que deberías tener rompiendo con la rutina. Lo peor, cuando necesitas un descanso, es llegar a casa y tener la misma rutina de siempre.

Así que si te encuentras en ese estado de cansancio, procura conseguir un entretenimiento, si es en familia mejor, y dedícate a él, de esa manera tu mente descansará, aunque no rompas del todo con la rutina, y te permitirá descansar, que es lo importante.

Falta de información

Cuando cuentas algo en público, ya sea mediante un blog, en una conferencia, en un curso, o lo que sea, tienes que intentar explicarlo todo, desde el principio. De no hacerlo, darás por hecho cosas que tú conoces, pero el que te presta atención, no tiene por qué y por lo tanto, lo que quieres transmitir, no llega correctamente a su destino.

A nosotros, nos lo han dicho en más de una entrada, que no llegamos a contar todo, por omitir partes que son sensiblemente importantes, para conocer la situación completa. Y la verdad es que es complicado, hacer comentarios, sobre todo cuando hay personas, empresas, situaciones, que prefieres omitir, por no entrar en detalles, pero que son importantes, para entender por completo lo que cuentas.

Y una vez más, cuando ocurre esto, la culpa es de la sociedad, ya que, en muchos casos, dar datos, te puede llevar a recibir demandas, o que tu puesto de trabajo se vea amenazado y, en los tiempos que corren, tiene poco sentido jugársela. Si la sociedad fuese transparente y todos fuésemos capaces de contar las cosas como las vemos, sin ningún miedo a represalias, seguro que a todos nos iría mucho mejor, ya que muchos de los que intentan aprovecharse del resto, se lo pensaría, no fuese que saliese en algún sitio quedando mal ante su entorno.

Deberíamos intentar ser siempre transparentes, pero es algo que, por desgracia, de momento, no es posible. Aún así, no perdemos la esperanza de tener esa transparencia, para empezar, en los que nos gobiernan, sabiendo, exactamente, dónde va el dinero que aportamos.

Vivimos en una sociedad egoísta

Pues sí, exactamente así es como estamos, en una sociedad que sólo piensa en uno mismo, importándole poco o nada, lo que le ocurra al de al lado. Y lo vemos en cualquier faceta de la vida, si alguien te pide qué se puede hacer para mejorar el entorno en el que vives, nadie piensa en mejorar su barrio, piensa en que le pongan un bar en el portal de su casa o un parque público en la parcela de al lado, o cualquier cosa que, lejos de ayudar a todo tu barrio, se acerque a algo que tú necesitas y no tienes.

En el trabajo es aún peor, ya que si puedes hacer porque despidan a tu vecino, antes que a ti, lo harás, de manera que se preserve tu comodidad, antes que el bien común. Y no digamos solidarizarse con alguien, si ese solidarizarse, implica que a uno le pueda traer consecuencias, te olvidas rápido del problema.

Y ese egoísmo, es el que, en buena parte, tiene la culpa de los momentos de crisis por los que pasamos, ya que los individualismos, hace que cada uno quiera abarcar mucho más que el vecino, sin importarle si es o no razonable o si con ello, se perjudica a algún otro. De hecho, si un trabajo, alguien estima que no debe hacerse, como medida de presión hacia quien lo exige, no le faltarán voluntarios para hacerlo sin problemas, cuando debería ser justo lo contrario.

Por eso, mientras esta sociedad siga siendo tan individualista, poco o nada avanzaremos y no es precisamente bueno.

Preocuparse

Hace años, cuando nadie llevaba encima un teléfono móvil, si alguien no llegaba a casa y le llamabas al fijo, en el que se suponía que estaba, o bien lo cogía y se acabó la preocupación, o bien, calculabas, desde esa llamada lo que tardaría en llegar y no te preocupabas en exceso. Por lo que la preocupación, llegaba, cuando hacía bastante tiempo que no le localizabas, donde se suponía que tenía que estar.

Ahora, con los móviles por todos los sitios, es más complicado, ya que, en el momento en que le llamas y no contesta, o bien le mandas un WhatsApp y no da señales de vida, te preocupas desde ese mismo minuto. De hecho, como muchos tendréis, han sacado los bancos de energía, que permiten cargar los dispositivos, sin necesidad de tener un enchufe cerca, dándonos a los usuarios un poco más de autonomía, con los nuevos dispositivos que consumen energía a raudales.

De todos modos, deberíamos ser más coherentes y no preocuparnos tanto, ya que quedarse sin batería es normal, ir a un sitio y "que te líen", es normal y en caso de no tener noticias de alguien (durante un tiempo prudencial), es que no ha pasado nada, ya que si pasase algo, seguro que la policía, hospital o alguien, llamaría enseguida, para darte la noticia. Preocuparse antes de tiempo, no lleva a ningún sitio, por lo que no lo hagas y mucho menos, porque un dispositivo esté encendido, o apagado.

Renovarse o morir

El título de esta entrada es típico, y de lo más cierto. Estos días hemos tenido, por un lado, la huelga de taxistas, por el uso del programa Uber y la queja de los libreros, porque ya no se vende como antes y no ven claro su futuro.

Y claro, en todo, por ejemplo, la prensa, hay que renovarse. El mundo está en ello, con Orbyt y El País con el kiosko. Obviamente, hoy en día se ven muchas tabletas, libros electrónicos, teléfonos inteligentes, y muchos más dispositivos, que nos permiten estar conectados, por lo que ya no tiramos tanto de papel y sí mucho de la red. Y esa es la renovación a la que tenemos que llegar.

En el caso de los libros, tienen que cambiar el modelo de impresión, que tiende a reducirse, por el digital y en el caso del taxi, pensar que deben bajar las tarifas y buscar otras alternativas, en lugar de pelearse contra aplicaciones, que les hacen la competencia. Y les hacen la competencia, no por ofrecer un mejor servicio, si no porque el gremio del taxi, en nuestra opinión, se ha acomodado y no innova.

Y ésto último es el secreto, estar siempre innovando, de manera que por mucho que otro baje los precios, regale cosas, o intente quitarte clientela, tú, le des ese toque, que te hace único. De hecho, cuando eres único, en la mayoría de los casos, el precio, no importará tanto.

Y dicho esto, volvemos al título, la única manera de funcionar y progresar es, mediante la constante renovación, para ofrece a tus clientes, siempre, algo nuevo.

Nueva victoria en casa

MMDigital Club de Fútbol 4 - Zamarros F.C. 0.

La afición empieza a estar acostumbrada a ganar de calle, y ante nuestro rival de esta semana, al ser un equipo abandonado, esperaba mucho más, por lo que salieron del partido con caras muy largas.

Aún así, los tres puntos, son los mismos y nos mantienen en la cima de la tabla a seis puntos del segundo y del tercero, lo que nos encanta.

La semana que viene tenemos una de las primeras finales, contra Alzira Falcons y no podemos fallar, ya que le tenemos tercero a seis puntos y no queremos que nos recorte ni uno. No va a ser fácil y mucho menos con la baja de Sebastián Zúñiga Téllez, nuestro central titular y que reparte muy bien el juego en el centro del campo. Por lo que, como decimos, no será un partido fácil, pero tenemos que ganarlo.

Establecer las normas

Cuando en una empresa, las normativa con respecto a un procedimiento, que pasa por varios departamentos, no se hace forma inequívoca y cada uno de los departamentos, pone su interpretación, tiene como resultado, que lo que le gusta a uno de ellos, no le vale al resto y viceversa.

Cuando se establece una normativa, debe hacerse contando con todos los que la van a utilizar y una vez establecida, se debe distribuir, de manera que todo el mundo, consultando el documento, sea capaz de entenderlo. En el momento en que derives la responsabilidad de la comunicación, a los departamentos que la han definido, lo estarás liando, porque cada uno, explicará el procedimiento, como él lo ha entendido, de ahí, que sea fundamental, explicarlo en un documento publicado y sobre el que todos puedan basarse.

Pero, por desgracia, no suele pasar así, de hecho, en un sólo equipo de trabajo, cada uno guarda la información como cree mejor y cuando otro del equipo, necesita esa información se las ve y se las desea, primero, para encontrarla y después, para entenderla. Lo mejor, son los sistemas de documentación centralizados y a los que todos tengan acceso, puedan buscar, etc... En nuestra opinión, tener todo en un sistema tipo wikipedia, es lo ideal, por la facilidad de uso y por la facilidad de búsqueda de la información. Y para que todo sea más fácil, sería bueno estructurar todos los artículos de la misma forma, de manera que todos sepan interpretarlos correctamente.

Si haces eso, tanto los equipos, como los departamentos, tendrán claros los procedimientos y reducirás, los tiempos de trabajo, que ocasiona, el hacer las cosas, fuera del procedimiento definido.

Cuando te dicen que no

Es curioso, pero cuando a alguien, al que tienes consideración, le pides algo y te dice que no, te sientes como traicionado. Ocurre en todas las facetas de la vida, en la amistad, en la familia, en el trabajo, sea donde fuere, las negativas, sientan mal. Y las razones para que ocurran, no son claras. Porque, ¿qué razón tienes para sentirte traicionado?

La verdad, es que no es la traición lo que te afecta, es que piensas que cuando le pides ese algo, a la persona que crees idónea, no te puedes plantear, que la persona no se vea tan idónea para ello y lo rechace, y esa falta de seguridad de la persona, es la que te hace sentir mal, ya que estás convencido, que es la persona adecuada y con capacidad, para hacer lo que le pides.

Por eso, es mucho mejor no hacerse ilusiones y dejar que las cosas sigan su curso, por lo que si tienes que pedirle algo a alguien, hazlo, pero no esperes que lo haga, simplemente, deja pasar el tiempo y si al final lo hace, sería la persona adecuada y, en caso contrario, no era, bien la persona, bien el momento, pero no te enfades, porque no es nada contra ti, si no su falta de inseguridad.

Los cargos públicos

Cuando alguien tiene un cargo público, que se ha ganado, gracias a los votos de los ciudadanos, debería tener un mínimo de respeto hacia esos ciudadanos y trabajar muy duro, para conseguir sacar adelante el cometido que tenga.

Pero en este país (y por desgracia en muchos otros), no es ese el significado, que te han elegido los ciudadanos sí, pero para trabajar, es otro cantar. Y así pasa, que tenemos el país, lleno de ladrones que no pisan la cárcel, de concejales que no hacen su trabajo y además, de ciudadanos enfadados, porque a los que han votado, no hacen lo que pensaban que iban a hacer.

Ahora, de este problema, los únicos responsables, somos los ciudadanos, ya que tenemos en la mano, el poder de echarles a la calle y no lo hacemos. Y no lo hacemos, porque resulta que votamos a los cargos públicos, por el miedo de que si no lo hacemos, podrían salir "los otros", que no son lo que quiero. Hay que ser "melón", para pensar así, ya que "los tuyos", hacen lo mismo que "los otros", por lo que lo ideal, sería echar a todos a la calle y que entren unos nuevos, con ideas razonables y meditadas y que nos den la confianza necesaria, como para poder elegirles.

Mientras tanto, seguiremos encontrándonos problemas, en nuestro día a día, por la incompetencia de unas personas, que no tienen ninguna integridad moral.

Décalogo para formar un delincuente

Absolutamente cierto, siempre nos ha gustado Don Emilio, y este vídeo no lo habíamos visto, os dejamos con él:

¿Planificación o improvisación?

Pues quizá, lo mejor, como siempre, es el punto medio. Ni el descontrol absoluto, que nos llevaría irremediablemente a hacer las cosas mal, ni una planificación tan estricta que sea imposible avanzar a buen ritmo, porque nos llevaría también al fracaso.

Es importante, a la hora de hacer un proyecto, planificarlo, estimar los costes, los tiempos, las personas, etc... pero si algo se tuerce, no te detengas, para poder hacer una nueva planificación exhaustiva, estudia la situación y actúa, porque lo importante es no retrasar en exceso el proyecto.

Por decimos, que lo mejor, es el término medio, porque la planificación, sin un poco de improvisación, no funcionaría y la improvisación, por el hecho de hacer las cosas de cualquier manera, tampoco. Estudia las situaciones, planifica lo que puedas y luego, sobre la marcha, ves haciendo lo que la cabeza te diga y en muchas ocasiones, lo que te diga la intuición (o el corazón), lo que sientas vamos, que muchas veces, acierta antes, que cualquier otra cosa.

La edad pesa

Pues sí, la edad pesa mucho, sobre todo a la hora de trasnochar. Y es que si antes, tirarte de fiesta tres días y luego irte a trabajar un lunes sin problemas. Pero según van pasando los años, la cosa cambia mucho, ya que el cuerpo no se recupera igual, las horas de sueño pasan factura y las resacas, duran un poco más.

Pero aún así, llega el momento de ir de fiesta, por la razón que sea, y ese chaval que llevas dentro, te empuja a hacerlo, dando como resultado, tener un lunes infernal en el trabajo, que estás deseando que pasa para irte a casa a dormir, porque el fin de semana fue un auténtico infierno.

De ahí, que cada edad, sirva para lo que sirve, y hacer las cosas fuera de la misma, te lleva, sin remedio, a pagarlo bastante caro. Disfrutar de cada edad, porque una vez que pasa, no vuelve y si intentas hacerlo en otro momento, os aseguramos que no es lo mismo.

Arranca la segunda vuelta

F.C. Valencia City 2 - MMDigital Club de Fútbol 4.

Otra semana que aguantamos y que, en la tabla, no ha variado ninguna posición, lo que nos sitúa líderes a seis puntos del segundo y tercero.

Seguimos con paso firme, pero teniendo claro, que no nos podemos dormir, ya que, como ha pasado otras temporadas, cualquier fallo podría poner en peligro el título.

Todo gratis

Es impresionante la manía que tenemos, a nuestro parecer, en España, de que nos den todo gratis. De hecho, pensamos que mucha de la culpa de la crisis, la tiene ese espíritu. Y es que, nos guste o no, las cosas cuestan dinero y, nos guste o no, sin ese dinero, las cosas no estarán bien. Pero claro, lo que pretendemos, es tener todo perfecto, pero sin pagar un céntimo y eso, amigos, no es así.

Hay miles de ejemplos, pero algunos muy claros, si en un grupo de amigos, se decide hacer algo, lo que sea, una fiesta, un viaje, cualquier cosa, que implique dinero, seguro que más de uno, en los restaurantes se pide el plato más caro, si hay invitaciones, reclama las suyas, en definitiva, está más centrado en la rentabilidad que le va a dar el evento, que en disfrutar del mismo y eso, la verdad, es un poco triste, ya que no es lo bueno.

Si os pasa esto y os veis reflejados, probar a disfrutar del momento, no pensando en el dinero, os aseguramos, que disfrutaréis y os gastaréis menos dinero, porque lo que tú consumes de más, que se paga entre todos, al final, es un mayor gasto para el grupo y, por lo tanto individual. Además, para controlar que lo amortizas, estarás permanentemente mirando qué consume cada cual, para no ser menos. Y eso, al final, te obliga a no disfrutar, que no es, suponemos, el objetivo.

Empeñarse en usar la tecnología

La tecnología es muy útil y cuanto más joven eres, más facilidad de manejo tienes. Pero claro, a veces, personas de cierta edad, se empeñan en querer usarla, sin tener ni la más mínima idea, no ya de cómo se usa, si no del significado de las cosas. Por eso, les cuesta tantísimo aprender.

Y es que, si usas, por decir algo, una tableta, tienes que tener claro, qué es lo que ves, qué cosas están en el dispositivo y cuáles en Internet, de dónde sale la conexión a Internet,... En definitiva, tienes que tener claro lo que tienes entre manos, para sacarle algo de provecho.

Pero no suele ser así, quieren usar la tecnología, pero sin intentar entenderla y final, les guste o no, los cacharros que se van comprando, se intentan utilizar y cuando se dan cuenta, que necesitan aprender a usarlos (que es, lo que no les interesa), y simplemente, dejan de utilizarlos.

Máquinas y personas

Las máquinas, hacen una serie de trabajos, que son repetitivos, por tanto, susceptibles de programar y cuando no hacen falta las desenchufas y no cuestan dinero.

Por el contrario, las personas, piensan, hacen trabajos, que no siempre son iguales, en cada situación, según diferentes variables, se hacen cosas distintas, cuando no necesitas a una persona, en un momento puntual, te cuesta lo mismo.

¿Por qué decimos esto? Muy sencillo, hoy en día, hay muchas empresas, empeñadas en tratar a las personas como máquinas, por lo que pretenden que, cuando no haya trabajo, se las pueda mandar a casa y llamarlas para que vengan, en el momento que se reactive.

Pero eso no suele ser posible, porque las personas, a diferencia de las máquinas, necesitan trabajar, para ganar dinero y con ello, vivir. Si despides a una persona, buscará otro trabajo y cuando te haga falta, lo más seguro es que no esté disponible.

Por eso, esta nueva moda, de despedir a la gente, en cuanto el trabajo escasea, aún cuando se espera que se reactive, es una auténtica locura. El coste de esa persona, en el periodo de bajón, es mucho menor, que el coste de necesitar a la persona y no poder tenerla.

Pensarlo, hacer números y plantearos volver a "lo de siempre", equipos bien formados, que lleven proyectos, os aseguramos, que su rentabilidad es muy superior a la de equipos que hacen de todo.

Cambiar de proveedor

Cuando buscas un proveedor para llevar a cabo algo, y lo encuentras, tomando la difícil decisión de adjudicarle el proyecto, lo que no debes hacer es seguir buscando. En caso de hacerlo, es probable, que encuentres un nuevo proveedor que te haga lo mismo, pero a mejor precio y tendrás la duda de si cambiar al que has contratado, por el nuevo, sobre todo si el presupuesto se reduce considerablemente.

En caso de hacerlo y tomar la decisión final, de cambiar de proveedor, lo que se debe hacer es quedar muy bien con el que tenías contratado. Para ello, debes llamarle, explicarle la situación y pedirle que te pase una factura, por el tiempo que ha "perdido" en tu proyecto.

En muchos casos, puede que salgas a mal con el proveedor descartado, lo que no es bueno, ya que no podrás contar con él en el futuro. Pero si planteas bien la salida y no intentas escurrir el bulto, seguro que lo entiende, te pasa una factura por el trabajo realizado y podrás contar con él, en caso de que el nuevo proveedor, no funcione como esperas.

Nosotros no lo recomendamos, pero es cierto que,  en muchas ocasiones, sobre todo el tema económico manda, y no tienes otro remedio.

Darlo por hecho

Ayer, a la puerta de la oficina, teníamos unas vallas en la zona de aparcamiento, con una señal de prohibido aparcar, por lo que nadie había aparcado. Luego, alguno se acercó a la valla, con la señal de prohibido y leyó un pequeño cartel en el que se decía que estaba prohibido aparcar, hoy (no ayer) y mañana. ¿Por qué entonces nadie estaba aparcado? Sencillo, porque casi todos dimos por hecho, que si las vallas estaban, con la señal de prohibido, sería para es momento.

Por eso, cuando estés haciendo cualquier cosa y necesites algo, no des por hecho nada, analiza cada parte y decide en base a todos los datos. De no estudiar por completo las cosas, y dando por hecho algunas, sin comprobarlo, te puede llevar a tomar decisiones equivocadas, que, antes o después, pagarás.

Lo del aparcamiento, obviamente, es una tontería, pero en un proyecto tomar una decisión, no basada en el análisis correcto de la situación, puede hacer que el proyecto sea un éxito o un auténtico fracaso.

Negocios entre amigos

Muchas veces, cuando necesitas algo, tienes algún amigo que, su negocio, ofrece lo que necesitas. En ese momento, te planteas si se lo puedes pedir a tu amigo o, por el contrario, debes buscar otra empresa para que lo haga.

Y es que los negocios, entre amigos, son peligrosos, ya que, ambas partes tienen que saber separar perfectamente, lo que es un negocio y lo que es la amistad y, por supuesto, jamás pagar con retirar la amistad un mal negocio.

Pero, por desgracia, las cosas no son así y si un amigo, que tiene un negocio, te oferta algo, con la mejor de las intenciones y sale mal, lo primero que se suele hacer, es retirarle el saludo, ya que, tu amigo debería prever, que iba a salir mal y, por lo tanto, evitar que estuvieses envuelto en el lío.

Por eso, si no sois capaces de aseguraros que las cosas van a ir bien y la amistad, estará por encima del negocio, no os metáis en líos y hacerlo con otra empresa, de otra forma, arruinaréis el negocio y la amistad y, sinceramente, no merece la pena.

Misión cumplida

MMDigital Club de Fútbol 6 - F.C. Valencia City 0.

Con la victoria de hoy, nos mantenemos líderes en la tabla y los únicos a los que no han ganado. Hemos conseguido poner dos partidos de distancia contra el segundo, por lo que, en esta segunda vuelta, tenemos que ganar, al menos, cinco partidos, para alzarnos con el título.

Queda mucho trabajo por hacer y lo estamos haciendo, manteniendo un nivel de juego bueno, que nos permite estar donde estamos. Aunque las lesiones no nos están respetando, tenemos una buena alineación, en la que se cubren unos a otros, teniendo, casi el mismo nivel de juego, a pesar de tener las lesiones.

La semana que viene, F.C. Valencia City, tiene la oportunidad de revancha, lo que nos obliga a hacer un buen planteamiento, e intentar ganar. Lo veremos en siete días.